No me importa que suene a cliché, es que es verdad. Hubo algunos momentos antes, durante y después del viaje en los que fuimos puestos a prueba. Sí, viajamos a un sitio de vacaciones para disfrutar. Fuimos al Vaticano, al Coliseo, al Foro Romano, etc. Pero también enfrentamos varios retos.
Quizás, en un primer momento, la gente no suele pensar realmente en esto, pero se debe tener la capacidad de resolver y darle solución a cualquier situación. Si no la tienes el peso del mundo se te va venir encima. En otras palabras, muchos se aprovecharán de ti.
Te doy unos ejemplos:
Tuvimos que ubicarnos para ir a un sitio y a otro. Y Google Maps fue nuestro mejor amigo, pero ¿qué pasaría si no lo hubiéramos tenido? En una ocasión tuvimos que levantarnos de la mesa de un restaurante antes de pedir la comida por las pésimas reseñas que leímos en internet; fue difícil, pero fue una buena decisión. También, en el vuelo de regreso nos cobraron de más porque la mochila superaba las dimensiones permitidas. Y todavía más situaciones que tuvimos que resolver de un modo u otro.